Con los primeros rayos cálidos de sol y la naturaleza despertando de la hibernación, para muchos también comienza una temporada menos agradable de astenia primaveral. Pero ¿qué se esconde tras este fenómeno? Y, lo que es más importante, ¿cómo quitarte de encima el cansancio?
¿De dónde viene la astenia primaveral?
Si bien no se conocen de modo concluyente las razones exactas de la astenia primaveral, existen algunos factores que podrían incidir en ella.
Luz diferente:
¿Acaso no deberíamos rezumar energía gracias a los días más largos? No necesariamente. El número creciente de horas de luz diurna en la primavera nos origina una paradoja. En una primera fase, el cuerpo reacciona con sensibilidad al cambio de luz.
En invierno, el cuerpo se adapta a la oscuridad, produciendo más melatonina, la hormona que nos hace sentir cansancio. Cuando los días se alargan repentinamente, este cambio puede afectar el cuerpo y causar cansancio hasta que haya adaptado su ritmo a las nuevas condiciones. Es durante este período de transición que se puede producir astenia primaveral.
Cambios de temperatura:
Los cambios de temperatura tan típicos de la primavera suponen una carga adicional para nuestro cuerpo. Durante este período, alternamos continuamente el calor de los espacios interiores con el aire exterior a menudo fresco, combinado a veces con días de sol calurosos. Este cambio constante supone un desafío a la regulación térmica de nuestro organismo, exigiendo mucha energía durante la fase de adaptación a la primavera. Ello hace que nos sintamos cansados y apáticos hasta recuperar nuestro equilibrio interior.
Desequilibrio hormonal:
Aparte de la adaptación de melatonina, la hormona del sueño, durante la primavera también se produce una modificación en la secreción de serotonina, conocida como hormona de la felicidad.
Como tal, el plus de rayos solares debería incidir positivamente en nuestro estado de ánimo. Pero el cambio rápido del nivel de serotonina, pasando de bajo a alto, puede causar en primera instancia un desequilibrio hormonal. Lo que queda es una fase en la que nos sentimos abatidos y desmotivados, contrariamente al chute de energía que esperaríamos con la llegada de la primavera.
¿Cómo combatir la astenia primaveral?
1. Ejercicio al aire libre
La primavera es el momento perfecto para trasladar tu práctica deportiva al aire libre. Correr, bicicleta, yoga en el parque… El aire libre y el entorno verde revitalizan y motivan. Ello no solo te ayudará a fortalecer el cuerpo, sino también a apoyar tu bienestar mental. 
2. Optimizar la alimentación
Con la primavera, también llega una selección fresca de frutas y verduras de temporada. Al integrarlas en tu dieta cotidiana, contarás con una opción sencilla de aportar a tu cuerpo los nutrientes necesarios para incrementar la energía, disfrutando al mismo tiempo de los placeres de la cocina de temporada.
3. Activador natural entre horas
Para días en que necesitas un impulso de energía adicional, recomendamos el RINGANAchi. Este activador natural constituye una mezcla potente de sustancias vegetales bioactivas con nota afrutada picante que incrementará tu nivel de energía de forma natural. Gracias a sustancias activas como la vitamina C de acerola en polvo, el extracto de semilla de guaraná y la L-teanina, el RINGANAchi es una alternativa perfecta al café. Además de combatir el cansancio post-almuerzo, es ideal contra pequeños bajones durante el día.
4. No olvides beber suficiente agua
Procura beber cada día como mínimo entre 1,5 y 2 litros de agua. Al llevar siempre una botella contigo, ya sea en casa o en la oficina, recordarás beber a intervalos regulares teniéndola siempre a mano.
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